Cómo iluminar correctamente una cocina

Con el paso de los años, la cocina se ha convertido en una auténtico espacio multifuncional, donde además de dedicarnos a elaborar nuestros platos culinarios, se ha convertido en un punto de encuentro para visitas y charlas improvisadas con amigos y familia.

Esto conlleva el rediseño de la estética de las cocinas, para cumplir con las necesidades actuales donde aprovechar el espacio al máximo y poder trabajar cómodamente, tiene que coexistir con la posibilidad de convertirlo en una zona de reunión.

Tanto para pequeñas como para grandes cocinas, interioristas y diseñadores tienen como reto el integrar una encimera en el espacio, sobre todo para las que tienen un tamaño reducido. Y es que, las encimeras de cocina son, por así decirlo, la esencia de esta, debido a que es el módulo que más espacio abarca, convirtiéndola en una pieza indispensable en la misma gracias a su uso polivalente.

Si bien hoy en día podemos encontrar un sinfín de diseños de encimeras elaboradas en diferentes materiales, también debemos hablar de cómo sacarle provecho colocando la iluminación correcta.

Según la ubicación del mobiliario, los expertos aconsejan usar una luz más fría (4000º) en las áreas de trabajo, y una luz más cálida (3000º) en la zona de reunión o comedor. Es probable que tengamos que utilizar la misma mesa o encimera para ambas funciones, pero gracias a la tecnología LED, adaptar el ambiente hoy en día es mucho más fácil, ya que permite elegir la temperatura de color de nuestras luces desde un mando o a través de una aplicación móvil, a la que controlamos el gasto de luz, sin necesidad de cambiar la bombilla o tocar la instalación de la luminaria.

Otro de los requisitos prioritarios para iluminar correctamente nuestra cocina, es tener una luz uniforme y sin sombras. En la mayoría de las viviendas, la luz de techo se encuentra en el medio de la estancia, por lo que a la hora de cocinar, nuestro propio cuerpo puede generar una sombra mientras preparamos la comida o utilizamos el fregadero. Para evitar esto, se pueden utilizar empotrables como DOTFIX 3W, que pueden colocarse tanto en el mobiliario, como en el techo muy cerca de la pared, evitando sombras e iluminando toda la encimera de manera óptima.

En el caso de tener una isla, en la cual la encimera quedará en mitad de la cocina, lo ideal sería tener uno o varios plafones como nuestro LINHA, plafón empotrable con tres temperaturas de color, que nos faciliten la visibilidad, no estorben para realizar el trabajo, podamos utilizarla tanto con una luz directa y fría cuando cocinamos, como con una luz cálida y agradable mientras se conversa o se toma un tentempié sobre la misma. Las lámparas colgantes son la opción más chic, otorgan elegancia y belleza a este espacio, pero que no deben utilizarse en caso de que la isla incluya placa o vitrocerámica en la propia isla. Nuestras CARMEN y VALENTINA, disponibles en un amplio abanico de colores y formas de pantalla intercambiables, crearán ambientes sosegados para disfrutar de una cena en solitario o en grupo, además de dar un toque sofisticado a la estancia.

Por último, para los más atrevidos, los apliques de pared son la última tendencia en las cocinas. Podemos observar que apliques como MILAN, tipo focos como IBAI, e incluso para los que prefieren el estilo vintage los tipo OBI, son los preferidos por interioristas y decoradores.