Simplemente sí. Aparte de la razón obvia de que la mayoría de los ventiladores de techo se utilizan también como lámpara o punto de luz de una habitación, hay otros motivos no tan conocidos que demuestran que los ventiladores no son solo para el verano.

Función verano-invierno. Aunque la mayoría de nuestros ventiladores incorporan esta función, muchas personas desconocen los diferentes usos que puede tener:

- Ahorro energético: Al usar la función verano-invierno, las palas giran en sentido contrario, haciendo que el aire vaya hacia el techo en vez de hacia el suelo. ¿Cuál es la ventaja de esto? Que nos ayuda a mantener una correcta temperatura en la habitación y ahorrar en calefacción, ya que el aire caliente pesa menos que el frío y se acumula en el techo, el ventilador nos ayuda a esparcirlo por la habitación y mantener los grados de forma homogénea y reducir el consumo en calefacción.

- Mayor confort: Esta función tiene un uso que incrementa nuestro bienestar al dormir, al colocarlo sobre una mesa de comedor, o sobre el sofá. Al hacer que el flujo de aire no vaya directo hacia abajo, sino que se mueva por la habitación, notaremos una suave brisa sin sentir el a veces molesto viento directamente sobre nosotros.

Otro aspecto a tener en cuenta para decidir usar los ventiladores durante el invierno es meramente el estilo que nos aporta a la estancia. Antes, los ventiladores se veían como un aparato meramente funcional. Sin embargo, los actuales y vanguardistas diseños; con nuevos materiales, formas y extras, han convertido a los ventiladores de techo en piezas de interiorismo con un valor no solo utilitario, sino también estético.

En este sentido, podemos encontrar incluso ventiladores que no parecen un ventilador, o que pueden ser personalizables, como el caso del ventilador WIRE. Esta tipología nos permite tener varias opciones a la hora de decorar, sin necesidad de sacrificar estética o funcionalidad.